Reunión de cancilleres de 14 países para analizar el problema
QUITO Y LIMA, 22 AGO – Los cancilleres de Argentina, Brasil, Bolivia, Colombia, Costa Rica, Chile, Ecuador, México, Perú, Paraguay, Panamá, República Dominicana, Uruguay y Venezuela se reunirán en Quito para analizar el inusual flujo de inmigrantes venezolanos que agita a Sudamérica.
La cita, a iniciativa de las autoridades ecuatorianas y que tendrá lugar el 17 y 18 de septiembre próximos, cuenta con el apoyo de la Organización Internacional de Migraciones (OIM) y la agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR).
El objetivo es «intercambiar opiniones, de ver qué están haciendo los países en diferentes aspectos» con relación a la masiva llegada de venezolanos, dijo el viceministro de Movilidad Humana ecuatoriano, Santiago Chávez, según un comunicado de la cancillería de ese país.
Desde el fin de semana pasado, Ecuador requiere la presentación del pasaporte a los venezolanos que pretenden entrar a su territorio. La medida excluye a menores cuyos padres portan el documento.
El ministerio de Exteriores de Ecuador anunció hoy que se instalará una mesa técnica de cooperación y movilidad humana con las autoridades de Venezuela para abordar «el flujo migratorio inusual de ciudadanos venezolanos», que según datos de las autoridades ecuatorianas es de un promedio diario de 4.200 personas.
Pero no sólo Quito endureció posiciones, también Lima exigirá desde este sábado el pasaporte, que resulta difícil de conseguir en Venezuela debido a la profunda crisis que ha llevado al desabastecimiento de alimentos, medicinas y hasta de papel.
Antes de la crisis migratoria, los venezolanos solamente debían mostrar su cédula para moverse entre los países andinos.
Este miércoles, según reportes de la prensa de Perú, venezolanos que viven en ese país emprendían apresurados viajes de regreso a su tierra natal para recoger a sus familias y volver a territorio peruano antes de que entre en vigor las restricciones en pasos fronterizos.
Pero esas trabas migratorias de Ecuador y Perú amenazan con traer problemas a Colombia, donde ingresaron más de un millón de personas desde Venezuela en los últimos cuatro años, según datos de la Cruz Roja reportados por la BBC.
Las autoridades de Bogotá están pidiendo a Quito y Lima definir una política única frente a los venezolanos, tras advertir sobre el riesgo de una «migración irregular» por las exigencias de pasaportes.
Bogotá teme que el requerimiento de Quito y Lima cause que los inmigrantes queden estancados en sus fronteras, por lo que su canciller, Carlos Holmes Trujillo, le solicitará mañana en Nueva York a la Organización de Naciones Unidas (ONU) que designe a un enviado especial para que coordine acciones multilaterales.
En Brasil, el presidente Michel Temer, en tanto, anunció el envío de más tropas federales al estado de Roraima, región amazónica en la frontera con Venezuela, tras los ataques del sábado de los que fueron víctimas 1.200 refugiados del país caribeño.
El ministerio de Seguridad Pública enviará 120 efectivos de la Fuerza Nacional de Seguridad para «reforzar la vigilancia en las ciudades de Roraima donde la situación es más tensa», informó hoy la estatal Agencia Brasil.
Esto ocurre luego de que la ONU emplazara a Brasil para que brinde garantías a los miles de ciudadanos que dejaron Venezuela debido a la grave crisis económica y política que enfrenta el gobierno de Nicolás Maduro.
Según datos de la OIM, en los últimos meses, 2,3 millones de venezolanos de marcharon de su país, que tiene una población total de 30 millones. (ANSA).
Información: |ANSA Latina|
Transcripción A.C.A.: Carlos Romero |C.N.P. 24.081|