En días pasados el Secretario General de Acción Democrática, Henry Ramos Allup, anunció la decisión del partido de separarse de la MUD motivado, principalmente, por la ausencia de cumplimiento de los acuerdos suscritos, entre ellos, elegir un candidato presidencial por primarias. Al ser interrogado por la prensa sobre cuál es el siguiente paso a seguir por AD, el compañero Henry Ramos Allup dijo lo que todos los adecos, en cada rincón del país, también está dispuesto a hacer: “vamos a recorrer el país, a escuchar a la gente y hacer propuestas”.
Solo unos minutos después, iniciaron los usuales ataques (virtuales, a través de bots y redes sociales) contra Henry Ramos Allup, a su familia y a su partido. Quienes le reclamaban a la MUD por incluir a AD, salieron a criticar a AD por abandonar a la MUD y después exigen “coherencia”. Hemos decidido en el partido del pueblo abandonar la quejadera, la indolencia, la parálisis, para salir a hacer política con la gente en el barrio, en las comunidades, en las fábricas, en los sindicatos, en los gremios, en las universidades, con la gente, no por twitter o instagram. Vamos a buscar respaldo del pueblo para cambiar a Venezuela, no “me gusta” o “likes”.
En Caracas, y en todas sus parroquias, ya hemos comenzado. Iniciaremos el camino que nos enseñó Rómulo Betancourt: La Democracia. Vamos a combatir a la tiranía con la fuerza de la voluntad general, exigiendo lo mismo que exige, unánimemente, la comunidad internacional: autenticas elecciones, con garantía y transparencia, para que con los votos el pueblo pueda elegir a su gobierno y finalmente los militares vuelvan a sus cuarteles, los corruptos respondan por sus delitos y rescatemos al pueblo del hambre, de la muerte y el miedo.
Los adecos aspiramos a una Unidad superior: la unidad de todo el pueblo contra la bota militar. Que con votos las mayorías empobrecidas se impongan a las minorías ilegítimamente privilegiadas, corruptas y cínicas que lidera Nicolás Maduro. ¿Qué no será fácil? Nadie dice lo contrario, ¿Qué es peligroso? Siempre lo ha sido, ¿Qué la gente está desesperanzada? Nuestro deber es proveer la esperanza y el ánimo combativo que nos saque de este marasmo. ¿En dónde me verán? En El Valle, en Santa Rosalía, en San Agustín en Coche, en Caricuao, en La Vega, en El Paraíso, en El Junquito y en todas las demás parroquias, dándole la cara a la gente, escuchándola y denunciando sus penurias. #CreemosEnVenezuela #ADesVenezuela
Autor: Danilo González Giral / @DaniloGonzaGira
Transcripción A.C.A.: Carlos Romero / C.N.P. 24.081